Gimnasia, el campeón que se vistió de gloria bajo el diluvio: ahora Mendoza es de primera

Gimnasia el campeón bajo el diluvio, otro equipo mendocino en primera.

Gimnasia, el campeón que se vistió de gloria bajo el diluvio: ahora Mendoza es de primera

¡La Gesta del Lobo! Gimnasia, el campeón que se vistió de gloria bajo el diluvio: Mendoza es de Primera

¡Y un día, el viejo Lobo rompió el maleficio! Después de transitar un camino áspero, lleno de barro, de madrugadas en canchas sin alambrado y de sueños postergados, Gimnasia y Esgrima de Mendoza se subió al tren de la historia.

Señoras y señores, el “Pituco” es de Primera División. Y que lo griten fuerte, que lo escuchen en el Parque General San Martín y en cada rincón de Cuyo: ¡hay un campeón que ascendió con el corazón en la mano y la frente bien alta!

La Final que te Rompe el Alma
Lo que se vivió en la cancha de Platense, bajo la copiosa lluvia de Buenos Aires, no fue un partido, fue una epopeya. Fue una de esas gestas que se cuentan al oído, con el mate caliente, cuando ya no queda voz de tanto gritar.

Gimnasia se había cansado de ser protagonista, de tener la chapa y que se le escurriera la gloria. Pero este 2025, de la mano de Ariel Broggi y con la base granítica que había dejado Ezequiel Medrán, el equipo entendió que era "ahora o nunca".

Cuando parecía que el fantasma de las finales perdidas volvía a estirar su sombra, cuando el reloj se hacía el distraído y el gol de Silba dolía como un puñal, apareció Facundo Lencioni. Una gambeta, una guachada del "Víctor" (sí, Legrotaglie, presente en cada alma blanquinegra), y el empate agónico. El pitazo final fue un desahogo, un grito de "¡Todavía no, carajo!".

El alargue fue un calvario épico, una pelea cuerpo a cuerpo con el destino, con el agua lloviendo a cántaros como testigo mudo de la batalla. Todo se definiría desde los doce pasos, ese martirio hermoso que te congela la sangre.

Rigamonti, de Travesaño y Gloria
Y en ese infierno bendito de los penales, emergió la figura de un gigante: César Rigamonti. El arquero, con esa mirada que no parpadea ante el abismo, se hizo un muro.

Cingolani la abrió, Lencioni la cruzó con esa zurda punzante que es un puñal. Pero cuando Rigamonti le dijo "NO" a Recalde, y luego a Mana, la fiesta empezó a armarse. El palo, el travesaño... la lluvia que borraba las lágrimas de tensión y las mezclaba con el barro sagrado.

Y cuando Diego Crego reventó el travesaño, no fue solo un penal errado. Fue el pitazo final de una novela que merecía este cierre dorado. ¡El Lobo volaba a Primera!

El "Pituco" es de Gala y Mendoza Canta
El ascenso de Gimnasia es más que un logro deportivo. Es la confirmación de que Mendoza es plaza grande. Junto a Godoy Cruz e Independiente Rivadavia (¡el rival de toda la vida!), el Parque General San Martín está completito en la élite. ¡Tres equipos en Primera, un hito!

Este es el broche de oro, la gesta dorada para el club fundado en 1908. El título de la Primera Nacional 2025 se sienta a la mesa con los viejos Nacionales, con la diferencia de que este es el triunfo del esfuerzo sostenido, de la garra y del temple que prometió el presidente Porreta después del porrazo anterior.

Dicen que, en el batifondo del festejo, entre los abrazos de Romano, Antonio y el llanto de Petruchi por su compañero héroe, se vio una sonrisa pícara, debajo de una galera empapada, con un frac mojado y la camiseta a bastones. Era la eterna figura del Víctor, que no quiso salir en la foto, pero se fue tranquilo, rumbo a la eternidad, porque hoy, por fin, SU Gimnasia y Esgrima es de Primera.

¡Salud, campeón! Hoy el Olimpo tiene sabor a vino mendocino y a revancha cumplida.