La Delio Valdez volvió a Mendoza a festejar sus quince años y lo hizo en el Arena Maipú a pura fiesta

La formación que funciona como cooperativa llevó toda su música a miles de mendocinos la noche del sábado 29 de marzo.

La Delio Valdez volvió a Mendoza a festejar sus quince años y lo hizo en el Arena Maipú a pura fiesta

Se trata de una de las formaciones más exitosas de este último tiempo. Lograron imponer el ritmo de la cumbia, de la movida latina y sobre todo, la importancia de la unión grupal y volver real la posibilidad de que cada miembro de la banda pueda tener sus cinco minutos de participación en el escenario.

La Delio Valdez es una banda de amigos que desde el 2009 hacen música, pero también es una formación que funciona bajo los pilares del cooperativismo y más de una vez se ha pronunciado a favor de los derechos que promueven el bien común de la sociedad. Durante su última visita a Mendoza así lo demostraron, cuando se pronunciaron a favor de los mendocinos detenidos por pronunciarse contra la mega minería en Uspallata. Se trata de Federico Soria y Mauricio Cornejo. Ambos ya fueron liberados, pero ocurrió en los últimos recitales mendocinos que el público ha aprovechado cualquier ocasión para demostrar su apoyo a la Ley 7722.

Cumbia is the new punk

Así rezaba la remera del DJ que dio sus beats al público en la previa de la Delio Valdez. Tal parece ser que la cumbia va ganando espacios y corazones, más que antes, en un contexto de crisis económica que orilla a las personas a comprar una entrada en un espacio seguro y las anima a bailar toda la noche esos ritmos latinos que aprendieron a sobrevivir ante cualquier prejuicio y gobierno. De a poco y gracias a bandas como Chico Trujillo y la Delio Valdez, se vuelve a poner de relieve la importancia de lo local, lo latino, el encuentro, la bebida, el disfrute, el goce y el compañerismo.

El cuidado entre quienes comparten el espacio del recital fue visible desde la organización de la banda. En una pantalla grande se ofrecían puestos seguros si los participantes atravesaban una situación incómoda o precisaban comunicarse con alguien.

Así, rodeados de un ambiente protector y seguro, la gente fue entrando por los espacios habilitados del Arena Maipú hasta colmar las plateas superiores.

Y se encendieron las luces

Los músicos fueron ocupando cada uno sus espacios, entonces las luces se encendieron y los trompetistas, cantantes y saxofonistas aparecieron con “La cancioncita” uno de los hits de la banda. Quien tomó la delantera fue Pedro Rodríguez. Como era de esperarse apareció Ivonne Guzmán, la mujer con raíces colombianas que cautivó a todos con sus movimientos, su body lleno de brillo y un tenue color rosa y su peinado listo para enredarse y desenredarse con estilo.

Enseguida pasaron adelante diversos integrantes como Manuel Cibrián y Black Rodríguez Mendez.

No perdieron oportunidad de lucirse el resto de los integrantes, incluyendo la genial saxofonista Agustina Massara y Santiago Mondolván en el clarinete y los teclados.

Fue una noche llena de color, de flores arrojadas al público, de baile y de buena onda, siempre recordando la importancia de la organización comunitaria y apelando al compañerismo.