



Fotografia Claudio Bello
La música tiene la capacidad de evocar recuerdos y generar emociones compartidas, y Beto Cuevas lo volvió a demostrar con su gira “Cuevas Acústico 2025”, una propuesta que lo acerca a su público de manera especial. El artista chileno, ícono de la música latina y exlíder de La Ley, eligió un formato despojado, íntimo y emotivo que tuvo a Mendoza como una de sus paradas más esperadas.Beto Cuevas cautivó al público mendocino c

El tour, que comenzó en Arequipa (Perú), busca rescatar la esencia de las canciones que marcaron distintas etapas de su carrera, desde los clásicos con La Ley hasta sus composiciones más recientes como solista. Sin grandes escenografías ni artificios, Cuevas se presentó en el Teatro Mendoza con una puesta acústica en la que su voz se convirtió en protagonista, acompañada por guitarras, percusiones suaves y arreglos sinfónicos delicados que realzaron la emotividad del repertorio.
Durante la noche mendocina, sonaron himnos como “El Duelo”, “Háblame”, “Aquí”, “Mentira” y “Tejedores de Ilusión, entre otros temas que hicieron cantar al público mendocino. También hubo espacio para canciones de sus discos solistas, que consolidaron su vigencia y demostraron la capacidad del artista para reinventarse sin perder identidad.
Más que un recital, el show se transformó en un encuentro cercano entre Cuevas y sus seguidores, en un espacio donde cada acorde y cada palabra llegaron de manera directa al corazón. La propuesta logró lo que se propuso: un viaje emocional compartido que puso las sensaciones a flor de piel.

Con esta gira, Beto Cuevas reafirma su lugar como una de las voces más queridas de Latinoamérica y deja en claro que sabe construir noches inolvidables. “Beto Cuevas Acústico 2025” no solo celebra su trayectoria, sino que invita a reconectar con la música que ha acompañado a varias generaciones y que sigue siendo parte de la banda sonora de sus vidas.